Arquitectura en Vilamarxant
– CENTRO DE SALUD Y AMPLIACIÓN
Francisco Nieto, Juan Deltell; Ampliación: mdm arquitectos (Clara Mejía, Juan Deltell, Guillermo Mocholí)
Partiendo de la búsqueda de una adecuada relación con el edificio original, la propuesta de ampliación del actual Centro de Salud se plantea como respuesta a las necesidades de la población de Vilamarxant y el equipo técnico de la Conselleria de Sanidad.
La propuesta parte de completar la edificación existente mediante un nuevo volumen de una sola planta situado en la actual zona de aparcamiento. Este hecho nos permite conseguir varios objetivos: generar un acceso secundario para el servicio de Urgencias, ubicar dos nuevas Consultas de Medicina General -así como su correspondiente zona de espera- y conformar la sala de Urgencias. Mediante un vestíbulo secundario, conectado con el existente de una manera clara, se permite tanto una utilización continua del centro como sectorizar el funcionamiento del servicio de Urgencias.
Por otro lado, tanto el cuerpo de mayor altura como el intermedio de vidrio avanzan un módulo de 5.40m en la dirección oeste para dar así cabida a las zonas de dormitorios que se sitúan sobre el segundo vestíbulo del edificio y la nueva zona de instalaciones para el volumen ampliado.
La Ampliación del actual Centro de Salud propone, desde la resolución del programa propuesto, unificar la superficie ampliada con el edificio existente, manteniendo el sistema modular y compositivo así como las soluciones estructurales y constructivas llevadas a cabo en la construcción del Centro en 1993.
Bajo estas circunstancias, se plantea:
+ Manteniendo la orientación de las consultas a norte y la de las circulaciones a sur, generar un brazo de nueva creación – en la zona de aparcamiento actual, trazado en continuidad de alineación con el volumen existente posterior-, que albergue las nuevas Consultas y permita reorganizar el programa total mediante el desplazamiento de piezas, así como generar un acceso independiente y complementario al actual que permita el control del edificio en su funcionamiento nocturno.
+ Habilitar un sistema de consultas de similares características y superficies a las existentes, pero buscando la mejora de ciertos aspectos -especialmente los que se refieren a cumplimiento de la Normativa Vigente Actual.
+ Actualizar los aspectos materiales buscando siempre un adecuado vínculo con la materialidad y composición existente.
+ Mantener la modulación estructural, así como el sistema constructivo, resolviendo de manera similar todos los detalles y encuentros.
+ Establecer una nueva zona de instalaciones que de servicio a la zona ampliada.
+ Resolver los actuales problemas funcionales en la planta primera, en lo que se refiere a los dormitorios, ampliando un nuevo módulo hacia el lado sur que permita albergar éstas estancias, así como el nuevo cuarto de instalaciones.
+ Mejorar las condiciones de Aislamiento Acústico, de acuerdo a la Normativa actual.
+ Dar una imagen definitiva al conjunto, dando unidad tanto en la parte edificada, como en la urbanización.
Desde el proyecto, se pretende resolver la urbanización de la parcela, tanto en aquellas zonas exclusivamente pertenecientes a la construcción original del centro como en las de nueva creación debido a la ampliación planteada.
GIMNASIO-PADEL
Jesús Felipe Mesa, Jesús Rodríguez Sánchez
En el recinto del polideportivo de Vilamarxant, en el espacio que ocupaban unos vestuarios, se sustituyó dichos vestuarios por unos nuevos. El programa de necesidades, señalado por el ayuntamiento, era la construcción de un gimnasio con pista de padel en cubierta, y sus vestuarios en planta baja El edificio ocupa una superficie aproximadamente rectangular de 20,30 x 13,78= 279,73 m2. La orientación Norte-Sur de la pista de padel corresponde aproximadamente con el eje longitudinal del edificio. El terreno donde se sitúa el edificio presenta dos niveles a modo de bancal con una diferencia de cota de 4.35 m. Las dimensiones de la pista de padel condicionan la forma del edificio, así como su correcta orientación Norte-Sur. Los criterios de diseño procuraron recoger los materiales actuales que se adapten a la economía del proyecto, y tengan un fácil mantenimiento. El hormigón visto y el vidrio son los materiales predominantes, y los que dan materialidad, por tanto, al conjunto. El edificio se resuelve con un único volumen, donde un núcleo de comunicación vertical formado por escalera y ascensor, articulan las tres plantas del edificio. En el frente Sur a nivel de planta baja el edificio tiene lindes con el terreno, presentando un muro de contención.
ESCOLETA INFANTIL
Josep Cano, Consuelo Morató
Este pabellón se sitúa en la esquina izquierda de la parcela correspondiente al Colegio “Horta Major”. Siguiendo dicha ubicación existen dos hileras de arbolado de pinos paralelos al edificio principal, esta direccionalidad y la proximidad de volúmenes adyacentes del edificio principal, condicionan el encaje de la escoleta, la cual se desarrolla a partir de dos ejes:
• Eje perpendicular al arbolado; da acceso al volumen principal que genera las cuatro aulas interconectadas que recaen al patio de juegos, y a su vez, genera dos volúmenes donde se desarrollan un área de despachos y un aula de uso múltiple.
• Eje paralelo al arbolado; da acceso directo al patio y la entrada principal a través de una pasarela, siendo este paso el eje de una futura ampliación.
– EDIFICIO DE 45 VIVIENDAS ADAPTADAS CON CENTRO DE DÍA
Gema Casani Gozalbo, Ignacio Docavo Lobo, Jesús Felipe Mesa
La parcela esta situada dentro de un área dotacional, bien conectada con el municipio, junto al nuevo instituto, el edificio multiusos y el colegio publico. El programa plantea una nueva forma de habitar, con condicionantes diferentes a los de la vivienda al uso, tanto en el nivel privado, el interior de cada uno de los apartamentos, como en el publico, el desarrollo tipológico de los bloques de viviendas y la organización del espacio exterior de todo el conjunto, que toma en este proyecto especial relevancia. Todo el proyecto se organiza en torno a una calle interior peatonal, ajardinada, trazada sobre el eje este-oeste de la parcela de geometría rectangular. Dispuestos en dos bandas construidas paralelas a la calle interior, se sitúan los diferentes edificios que dan cabida al desarrollo del programa. En el lado norte, en el punto de mejor accesibilidad de la parcela, se situa, el Centro de Día, edificio de uso público destinado tanto a los residentes como a los vecinos de Vilamarxant, tiene accesos tanto desde el exterior del recinto como desde el interior. Junto a el un pequeño edificio, de una planta, destinado a albergar los Servicios Comunes de las viviendas y separado únicamente por un pequeño espacio ajardinado, uno de los dos bloques que alberga viviendas. En el lado sur un bloque continuo se prolonga de un extremo a otro de la parcela. ¡Demasiado largo! Jugamos con la geometría del solar y la contorsionamos, moldeando la calle, perdiendo la rigidez de la trama, generando espacios ajardinados. Entre estas dos bandas construidas y los lindes de la parcela, se proyectan sendos espacios libres longitudinales, a los que se accede desde el interior de las viviendas de planta baja, con destino al cultivo de huertos ocupacionales.
LAS VIVIENDAS: El modulo de vivienda se distribuye interiormente en dos bandas longitudinales: la destinada a estar-comedor y dormitorio unidas por una puerta corredera y una segunda que agrupa los núcleos húmedos y las zonas de almacenamiento, dispuestos de manera que todas las piezas tienen ventilación natural. Se ha proyectado la cocina independiente de la zona de estar, vinculada a un lavadero tendedero exterior, protegido de las vistas por una celosía de lamas metálicas, pensando en todo momento en la manera de habitar las personas a las que van destinadas. Los comedores se vinculan visualmente, a través de grandes ventanales acristalados, a las espacios comunes y de relación, mientras que los dormitorios se convierten en el espacio privado de la vivienda.
La organización de la planta superior de los bloques de viviendas se hace intercalando cada dos viviendas un patio común pasante con acceso desde el corredor, del que se independiza mediante una celosía. La zona de día de las dos viviendas se abre a este patio en el que también tienen su acceso.
EDIFICIO DE SERVICIONES COMUNES: Se trata de un edifico de una planta, que alberga los siguientes usos: despacho de administración, lavandería, almacén, servicios generales y sala de usos múltiples. Con una superficie útil de 200 m². Se accede a él desde la calle peatonal, atravesando una terraza, en parte cubierta por una pérgola de lamas de madera que sirve, tanto como espacio de estar al aire libre como de protección del sol del suroeste. El edificio se conforma con dos volúmenes, la sala de usos múltiples de mayor altura y el destinado a la administración, lavandería y servicios.
EL CENTRO DE DIA: En el volumen sur, de una planta, se disponen los elementos del programa que requieren un uso más reducido: los vestuarios, el despacho de administración, la consulta de enfermería conectada con el baño geriátrico, el almacén general y la consulta asistencial. En volumen norte se ubican los espacios de uso más abierto, propios del centro. Así, desde la entrada, junto al ascensor, se accede a los aseos generales, a las dos salas de apoyo a actividades, al comedor con la cocina y el almacén. Este espacio de comedor, con visuales a los patios abiertos en ambas fachadas, que actúan de bisagra entre los dos edificios. Desde el hall, la escalera y el ascensor, dan acceso a la planta superior. En ella se ubica la sala polivalente de atención geriátrica, rehabilitación y terapia ocupacional. Un corredor, comunicado visualmente con la planta inferior, da paso a las distintas estancias, donde un mirador abre las vistas al entorno, mientras que dos grandes ventanales introducen la luz del sureste y suroeste.
– CENTRO CLUB DE CONVIVENCIA
Mercedes Poveda Balaguer, Cesar Jiménez Alcañiz
El programa definido por sus futuros usuarios (jóvenes de la tercera edad), su emplazamiento y su entorno han sido factores importantes a la hora de componer volumétricamente el edificio del Centro Club de Convivencia de Vilamarxant. La parcela situada en una zona de reciente creación aún no consolidada, invitaba a la incorporación de un edificio actual y así se hizo, pero sin olvidar la perspectiva que desde el rio ofrece el edificio, con la silueta del centro histórico y el campanario al fondo. Desde lejos el edificio se difumina con el color blanco del exterior, la composición vertical de sus huecos superiores y el rojizo de la cubierta que se asemeja a la teja que inunda el fondo.
El programa solicitado precisaba espacios diferenciados para su uso, despachos, salas de terapia y juegos, cafetería etc., que ocupan alrededor de 800 m2 y la pieza principal que ha condicionado el diseño: Una Sala de 450 m2. Dos piezas de geometría sencilla se maclan albergando estos espacios diferentes, en cuanto al uso y a su escala, materializadas por hormigón banco y vidrio. La elección de materiales se hizo pensando en su sencillez volumétrica y fundamentalmente en un obtener un coste bajo del mantenimiento futuro.
El hormigón se cierra prácticamente en todo su desarrollo, en planos que se enfrentan a paramentos opacos de los edificios colindantes, se perfora en los paralelos a las fachadas del municipio, y se abre por completo dejando paso al vidrio buscando la vista de la huerta que nos rodea. En el hall, la escalera gira para que el edificio se enseñe a sí mismo, desde el acceso vemos el paso hacia la Sala, las vistas sobre el jardín lateral y la planta superior.
Los espacios interiores repiten el blanco del hormigón visto y se entonan con el mármol blanco macael del suelo en los pasos del edificio. La estructura horizontal se resuelve con forjado unidireccional de vigueta armada, y en el acceso con una losa reticular que cubre el hall y la escalera de acceso. Una solera ventilada protege al edificio del suelo.
Por el día el vidrio oscuro protege y el paisaje es visible desde el interior. Por la noche el hormigón blanco se oscurece y el vidrio se transparenta mostrándonos el interior de la Sala y a sus ocupantes cuando esta, está en uso. El acceso al Salón es progresivo, primero el hall, luego el paso y accedemos a un espacio cubierto de menor altura que es la antesala del espacio principal, damos un paso y entramos en La Sala y la madera nos acompaña. La Sala de grandes dimensiones precisaba de un tratamiento más cálido, por ello la estructura de madera laminada nos brindo la posibilidad de construir un gran espacio diáfano con un precio razonable. Los pilares estructurales y el muro de hormigón se geminan con los grandes pilares de madera en forma de K, que reciben las vigas con la forma curva visible en el exterior. El techo y el suelo también son de piezas de parquet que conforman un espacio cálido de color madera, la chapa zinc de color rojizo cubre el salón y este incorpora la climatización vista en el interior con grandes tubos de color anodizado compatible con el muro cortina.