9 de diciembre, 2010

Viviendas de protección oficial. Barrio de Velluters III

34 VIVIENDAS DE V.P.O., LOCALES COMERCIALES Y GARAJE EN LAS CALLES MALDONADO, TORNO DEL HOSPITAL Y EN BANY

Fernando Vegas López-Manzanares, Camilla Mileto

Se trata de un edificio de 34 viviendas V.P.O., locales comerciales y aparcamientos ubicado en la manzana de forma triangular delimitada por las calles Maldonado, Torno del Hospital y En Bany del Barrio de Velluters. Dicha manzana se encuentra parcialmente dentro de la unidad 1BR del Barrio de Velluters, que fue objeto de aprobación de una Modificación puntual del PEPRI, un Programa de Desarrollo de Actuación Integrada para su zona y un proyecto de expropiación que ha franqueado la propiedad del suelo a la empresa municipal.

La aparición de un edificio de nueva planta de estas dimensiones en el barrio de Velluters debe llevar consigo un estudio muy detallado acerca de su integración y relación con el entorno. La coherencia con el barrio debe extenderse tanto a la volumetría, como a la relación macizo-hueco existente en los edificios ejemplares del entorno y en los acabados finales, de modo que no se produzca un fuerte impacto visual que contraste con esa cierta continuidad que puede apreciarse cuando se va callejeando por el barrio.

El solar donde se actúa ocupa un sector de la calle Angelicot y unifica dos manzanas preexistentes con el objetivo de regularizar la trama, tal y como se preveía para la manzana en el PEPRI. Otro de los edificios que conforman la manzana (Maldonado 18) fue adquirido por AUMSA para su saneamiento incorporándose al proceso de remozamiento de la zona. Sin embargo, este edificio fue declarado ruina inminente por el Ayuntamiento de Valencia dado su lamentable estado de conservación y, en consecuencia, demolido con el compromiso de la reconstrucción de su fachada protegida integrada en el nuevo proyecto de viviendas para la manzana.

Las generosas y proporcionadas dimensiones de los vanos con respecto al conjunto del paño de fachada son posibles debido a que los huecos están concebidos de forma que, cuando sea necesario por correspondencia con la distribución interior, compartan dos estancias. De esta forma, se evita aumentar considerablemente el número de huecos en fachada, creando la relación deseada con la fachada protegida. Este hueco además, se encuentra potenciado en su profundidad creando unas jambas importantes al introducir armarios empotrados en la línea de fachada, dándole solidez y firmeza, evocando los muros de carga de los edificios históricos. Se pretende conseguir un tipo de hueco de gran limpieza y uniformidad, de aspecto acabado moderno, pero inspirado en sus antecesores de las fachadas de los palacio de del siglo XVIII valenciano, de gran austeridad, dignidad y contención, y al mismo tiempo de gran solvencia.
La edificación respeta en todo momento la profundidad prevista para dicho solar de 11m, de manera que crea un espacio común en la manzana generoso y salubre, que permite una iluminación y ventilación excepcional a las viviendas.

El acceso a las viviendas desde la calle implica un recorrido a través del patio. El recorrido por este espacio abierto guarda relación con el pasado en los patios interiores de los palacios y casa nobles tradicionales del casco histórico de Valencia. Este lugar ejerce al mismo tiempo una labor de filtro entre lo que sería el carácter público y el privado, una transición entre la calle y la vivienda. Se trata de un espacio con una calidad espacial importante que aporta un estímulo a la comunicación entre los vecinos de la comunidad. Esta idea se refuerza con la aparición de vegetación de una dimensión importante, en forma de una palmera de altos vuelos y dos terrazas ajardinadas dispuestas en cascada, dando un carácter de pequeño parque privado.

Tres núcleos de comunicación vertical, con sus tres escaleras correspondientes en directa relación con el patio tal como sucedía en los antiguos palacios del centro histórico, dan acceso al conjunto de las viviendas.
 

23 VIVIENDAS DE V.P.O., LOCALES COMERCIALES Y GARAJE EN LAS CALLES MALDONADO, ROGER DE FLOR Y RECAREDO

Fernando Vegas López-Manzanares, Camilla Mileto

El proyecto de construcción de 23 Viviendas de Protección Especial destinadas al alquiler nace de un encargo de la empresa AUMSA (Actuaciones Urbanas Municipales S.A.) y se engloba dentro de las actuaciones que estos arquitectos están desarrollando de unos años a esta parte relacionadas con la planificación, gestión y desarrollo de la Unidad de Ejecución 1 del Barrio de Velluters.

Ubicación y objeto del proyecto

Se trata de un conjunto de tres edificios, dos de nueva planta (bloques A y B) y uno rehabilitado (bloque C). 

El solar existente de los números 26 y 28 de la calle Recaredo, ocupado por el bloque A (11 viviendas), reproduce en términos generales la volumetría de los edificios anteriormente existentes en función de la normativa actual. 

En el solar de los números 23, 25 y 27 de la misma calle Recaredo se ubica el bloque B (9 viviendas), cuya reducción respecto a su estado anterior ha sido el fruto de la ampliación de que ha sido objeto esta calle en aras de un mejor tráfico en el centro. Bajo los bloques A y B y el tramo de la calle Recaredo que los separa, se ubica un aparcamiento subterráneo con 43 plazas para coches y 19 trasteros. 

En cuanto al bloque C, sito en la calle Maldonado nº 33, se procede a la restauración del edificio existente, con independencia de la inexistencia de ningún grado de protección especial para el edificio.

Filosofía y planteamiento del proyecto

Este equipo de arquitectos piensa que una intervención en el centro histórico debe ser fundamentalmente de rehabilitación de lo existente con la recuperación razonable de la materialidad del mismo y, en el caso de la existencia de solares, la construcción de nueva planta con la recuperación de la tipología y el planteamiento de la edificación histórica del centro histórico, aunque ésta se haga con otra materialidad.

Ambas actitudes son posibles en compatibilidad con el cumplimiento de la normativa vigente en materia de ordenanzas, requisitos técnicos y estándares de la edificación, y corresponde únicamente al proyectista el deber de estudiar y entender la tesitura de cada centro histórico para afrontar la responsabilidad de respetar la integridad de lo existente e insuflar en la edificación de nueva planta del suficiente contenido y enjundia para responder al contexto histórico, material y compositivo del centro histórico.

Los bloques de nueva planta A y B funcionan de manera independiente con núcleos de comunicación autónomos, pero se unen bajo la rasante de la calle para formar dos plantas de sótano. El bloque C que es objeto de restauración no posee planta de sótano por la imposibilidad de excavar bajo su solar manteniendo la integridad del edificio y su distribución responde a la restauración del edificio existente con su núcleo de comunicación independiente del bloque B al cual está adosado.